Bárbara Paillal - Viernes 9 de febrero 2024 – Radio.udechile.cl
Desde la derecha, el exministro Mañalich valoró las declaraciones del Mandatario y afirmó que lo elevan a "categoría de Jefe de Estado". Mientras, el exvocero Jaime Bellolio dijo que sus palabras muestran un aprendizaje propio del cargo que habita.
“Durante su gobierno, las querellas y recriminaciones fueron, en ocasiones, más allá de lo justo y razonable”. Estas fueron parte de las palabras que el Presidente Gabriel Boric le dedicó al expresidente Sebastián Piñera en el marco del funeral de Estado del exmandatario, un gesto que el mundo político lo ha entendido como una disculpa hacía su predecesor.
En particular, las declaraciones se refieren a las acciones que impulsó el entonces diputado Gabriel Boric junto a los partidos que hoy son parte del oficialismo durante el estallido social, las cuales buscaban que el expresidente asumiera su cuota de responsabilidad por las graves violaciones a los derechos humanos ocurridas en Chile en el 2019.
“Quienes sean responsables los vamos a perseguir nacional e internacionalmente con todas las vías de la ley así que señor Piñera, está avisado“, advertía el actual Jefe de Estado durante la campaña presidencial de 2021.
En esta jornada, el Presidente Boric dio pie atrás a sus declaraciones anteriores al afirmar que el exmandatario “actuó en ocasiones de una manera con la que discrepé, pero usando siempre, repito, siempre, los mecanismos de la democracia y la Constitución”.
De camino a la misa que fue oficiada en la Catedral de Santiago en honor al expresidente, el ex ministro de Salud, Jaime Mañalich, señaló que “esa suerte de disculpa” va en la línea de una tónica que ha “mantenido elevando al Presidente Boric a categoría de jefe de Estado como lo vimos tan claramente hoy día. Eso es bueno para Chile, deja atrás querellas que nos hacían daño a todos”.
Mientras que el ex vocero de Gobierno durante el segundo mandato de Piñera, Jaime Bellolio, apuntó que las palabras de Boric muestran un aprendizaje propio del cargo que habita. “De ese ímpetu inicial, a saber hoy día, que la experiencia que tenía el expresidente Piñera era muy valiosa, la dificultad que tiene estar en ese cargo cuando uno está desde afuera, desde la oposición, es muy distinto”, sostuvo.
“Yo creo que se ha dado cuenta de la importancia de la política bien hecha y en eso se agradece también sus palabras”, añadió.
Otra voz fue la del senador de Demócratas, Matías Walker, quién concordó con el exministro Mañalich al indicar que el discurso estuvo “a la altura de un jefe de Estado, mostrando gestos de grandeza e incluso reconociendo que hubo acciones que fueron más allá de lo justo y de lo razonable, y eso me parece que enaltece a la República”.
La gran incógnita es cómo la declaración de Boric fue procesada en la interna de los partidos de gobierno, que por el momento habían acallado sus críticas a la gestión del expresidente Piñera, atendiendo su trágico fallecimiento. No obstante, por la tarde, representantes del ala izquierda del oficialismo comenzaron a evidenciar sus posturas.
El diputado del Partido Comunista, Matías Ramírez, recriminó la declaración del Presidente afirmando que “el trabajo de cientos de abogados permitió dejar en evidencia graves violaciones a los derechos humanos que existieron durante el gobierno de Piñera, denunciar nunca es un exceso, es un deber ante la opresión del Estado“.
“Ese mismo trabajo permitirá formalizar, por ejemplo, a (General) Yáñez en mayo”, añadió el parlamentario.
En la misma línea, su compañera de militancia, la diputada Lorena Pizarro (PC), afirmó que “lo que sí fue bastante ‘más allá de lo justo y razonable’ fueron los asesinatos, las mutilaciones durante el mandato de Sebastián Piñera”.
“Este discurso está cargado de negacionismo: ofende y revictimiza a todos a quienes les fueron violados sus derechos humanos. Incomprensible”, afirmó.
En conversación con The Clinic, el diputado del Partido Socialista, Jaime Naranjo, abordó la segunda acusación constitucional en contra del expresidente Piñera, donde para lograr los votos de su aprobación en la Cámara Baja, se mantuvo por más de 15 horas leyendo la fundamentación del documento.
Sobre esta arista en particular, el parlamentario dijo que “esa acusación se basó en antecedentes muy sólidos y muy firmes para sostenerla. Esa acusación en ningún caso se puede enmarcar como un exceso” y, en esa línea, descartó que la izquierda haya tenido un ánimo destructivo.
“Contribuimos en todo lo necesario para abordar la pandemia. Las ayudas económicas que se plantearon eran muy bajas y se requería de mayor aporte, cosa que fue acogida”, indicó.
En la misma línea que Pizarro, la diputada Carmen Hertz sostuvo que “lo que fue mucho más allá de ‘lo justo y razonable’ fue haber sido el responsable político institucional de las graves y generalizadas violaciones de los derechos fundamentales durante la revuelta popular, de los más de 400 traumas oculares entre ellos Fabiola Campillai y Gustavo Gatica, de las lesiones que incapacitaron a muchos, como Mario Acuña”.
“Pretender que el expresidente Piñera utilizó ‘siempre, siempre, los mecanismos institucionales y democráticos’ es una forma de negacionismo, como sociedad no podemos amparar la impunidad y la falta de reparación a las víctimas”, subrayó.
Imagen de Portada: Agencia ATON.