Crónica Digital 23 junio, 2024
Salvador Allende Gossens nació el 26 de junio de 1908, se cumplen 116 años de su natalicio. Siempre fue un luchador social, siendo joven conoció la cárcel y relegaciones producto de la persecución de la derecha. Integró las Milicias Socialistas, para combatir al nacismo en las calles en la década de los años 30.
Diputado, Ministro, Senador y Presidente de la República (1970 – 1973).
Conoció la cárcel y la persecución política; fue expulsado de la Universidad, a la que es reincorporado, cuando fue derrocado Ibáñez. Durante su época universitaria, fue presidente del Centro de Estudiantes de Medicina y de la Federación de Estudiantes de Chile, Además director del grupo “Avance”.
En 1952, fue candidato presidencial, obteniendo un cinco por ciento de los sufragios. En 1956, participó en la formación del Frente de Acción Popular (FRAP), alianza de partidos de izquierda que tuvo una duración de ocho años. Para las elecciones presidenciales de 1958, el FRAP lo presentó como candidato y obtuvo un 28,8% de los votos. Para las elecciones presidenciales de 1964, fue nuevamente candidato apoyado por el FRAP, logró casi un 39% de los sufragios.
En 1959, visitó por primera vez la República de Cuba, donde se entrevistó con Fidel Castro Ruz. En 1965 visitó Cuba y Europa, donde realizó una gira por los países socialistas. En julio de 1967, representó a Chile en la primera conferencia de la Organización Latinoamericana de Solidaridad (OLAS), surgida de un acuerdo Tricontinental llevado a cabo en La Habana en 1966. A dicho encuentro, asistieron delegados de 27 países. En 1967, asistió al cincuentenario de la revolución soviética. A su regreso, visitó Cuba y México. En 1969 volvió a visitar Cuba, Corea, la República Democrática de Vietnam y Camboya.
Fue electo Presidente de la República el 4 de septiembre de 1970. En las elecciones presidenciales de 1970, obtuvo más de un 36% de los votos, por lo que tuvo que ser ratificado por el Congreso Pleno, el 24 de octubre de 1970, con 153 sufragios, contra 35 de Alessandri y 7 en blanco. Ejerció el cargo entre el 3 de noviembre de 1970 y el 11 de septiembre de 1973.
Su objetivo, instaurar el socialismo por la vía democrática o “Vía Chilena al Socialismo”. En el ámbito de las relaciones internacionales, se restablecieron las relaciones bilaterales con Cuba y se iniciaron, por primera vez, relaciones con China, Corea, Vietnam y Alemania Oriental. En julio de 1971, visitó la República Argentina y entre agosto y septiembre, en ese mismo año estuvo en Colombia, Ecuador y Perú. Entre noviembre y diciembre de 1972, realizó una gira a México, a Estados Unidos, la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS) y Cuba. En mayo de 1973, asistió a la asunción del mando del presidente Héctor José Cámpora en Argentina.
El 11 de septiembre de 1973, fue derrocado mediante un sangriento Golpe de Estado cívico-militar. Murió ese mismo día durante el ataque al Palacio de La Moneda.
Salvador Allende significó nobleza espiritual, una permanente reafirmación del compromiso incondicional con la emancipación, autonomía de liberación humana y de rebeldía del pueblo.
Salvador Allende es rescate de memoria histórica, por su coraje y consecuencia, inteligencia y voluntad transformadora popular. Fue un líder enraizado en el alma nacional, de discursos entendibles y de gran valor didáctico y de riguroso orden analítico que recogía las aspiraciones populares. Constructor de la primavera de las esperanzas y de creatividad emancipadora.
Conspiraron, contra Chile, el gobierno norteamericano, el Pentágono, la Agencia Central de Inteligencia (CIA), el Buró Federal de Investigaciones (FBI), las instituciones económicas y financieras internacionales, el Banco Mundial, en acuerdo con la burguesía nacional, el ejército, marina, aviación y carabineros, entrenados en la Escuela de las Américas, donde se formaron la mayoría de los dictadores y torturadores, para convertir a las instituciones armadas en el brazo masacrador de la clase dominante.
La muerte del Presidente Allende, significó el atropello a la dignidad y de tiempos tormentosos, de penurias, humillaciones y oscurantismo. El 11 de septiembre de 1973, denunció y vaticinó la traición a la patria. Nos anticipó lo que vendría, un periodo gris y amargo y así fue. El Allendismo, es también un sentimiento y una corriente política de la ciudadanía popular, de las libertades públicas y de la conciencia social.
Para que Chile sea democrático, debe regirse por una Constitución Democrática y Representativa de la voluntad popular. Sin embargo, aún nos oprime una institucionalidad castocrática, creada y heredada de la tiranía.
En muchos lugares del planeta, los memoriales, museos, monumentos los promueven los vencedores. En Chile, los lugares y sitios de memoria, han sido peticionados por las organizaciones de víctimas del terrorismo de Estado y las organizaciones e instituciones que cuentan con caídos en dictadura. Hay que honrar a Salvador Allende y a las víctimas y luchadores sociales, reconocer a quienes ofrendaron sus vidas por un porvenir mejor, que reivindique los ideales y utopías inconclusas.
Por Ricardo Klapp Santa Cruz Presidente del Centro Cultural de Derechos Humanos Salvador Allende Santiago de Chile, 23 de junio 2024
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