Por Glenn Meza - Ex dirigente de la Universidad Técnica del Estado -01 de mayo 2021
Pamela no ofrece nada salvo otro 10% siempre. No aprovecha su popularidad entre sus «nietitos» para construir nada, ni un esbozo de programa de gobierno como haría cualquier otro interesado en serio en su lugar.
O sea, no hace populismo, sino más bien histrionismo para seguir con su popularidad y llevar al «abuelo gobernador» a una segunda vuelta, para luego ganarla con su desembozado e irreverente apoyo contra las cúpulas políticas.
Si maltés sale segundo, Pamela Jiles pondrá en jaque todas las negociaciones partidarias para apoyar a Orrego y a la DC, versus el apoyo a su pareja. Y como se resuelva ese «intríngulis» decidirá mucho del futuro.
Conspira contra su estrategia la emergente relevancia que ha adquirido Yasna Preboste, la figura más progresista de toda la DC que ha contradicho permanentemente a Fuad Chaín desde el Senado, y empeñada ahora en unir a «toda» la oposición enfrentando en serio al gobierno y a su presidente, convirtiéndose en ello en la figura más relevante de la Unidad Constituyente.
(Lo que muestra de paso, que bastaba una decidida vocación por lograr esa unidad en vez de todos los «peros» de Fuad y su duopólica coalición).
La unitaria y transparente forma en que Yasna Provoste ha tomado su liderato, puede terminar con la carrera del «abuelo «y con los 10%, lo que sería un golpe en el alma a la histriónica campaña de la Jiles por su pareja.
Pero no solo aquello, Yasna Provoste puede llegar a convertirse en la figura que salve a la DC y su coalición de una catástrofe electoral en las parlamentarias de noviembre próximo, e incluso encabezar las presidenciales y ganar en primera vuelta con toda la oposición tras ella.
Es una figura con marcadas posiciones de izquierda dentro de su partido, el que será su principal obstáculo para lograrlo.
A Ignacio Walker, René Cortázar, José de Gregorio, Alejandro Foxley, Fuad Chain y otros neoliberales de tomo y lomo que han llevado detrás de posiciones aparentemente técnicas a su partido y a la Concertación al duopolio neoliberal, se les caería el pelo antes de respaldarla. Lo mismo al laguismo PS-PPD-PR.
No la tiene fácil Yasna Provoste, pero desde Bachelet 2005 que es el pueblo y no los partidos los que deciden quien será su líder. En efecto, ese año el PS estaba decidido a que el Panzer Insulza fuera su presidencial. Pero Michelle sin buscarlo se transformó en la elegida del pueblo en las encuestas y no hubo como bajarla del clamor popular, obligando a Escalona y su CC a nominarla como su candidata.
Algo parecido pasó con Lagos el 2017. Trató por todos lados de ser el candidato, pero no pasó del 3-5% en las encuestas mientras Guillier sin buscarlo se convirtió en el regalón de la gente.
Ni hablar del papelón de Carolina Goic, la que con su camino propio terminó obteniendo un 5,88% en primera vuelta y llevó a un desastre a sus candidatos a parlamentarios.
Daniel Jadue es presidenciable sólo por eso, la gente lo viene prefiriendo pese a ser comunista y pese al resto de los y las candidaturas opositoras que ni despegan pese a ser nombrados y contar con todo el apoyo de sus respectivos partidos.