DESIGNADO UN CUESTIONADO FISCAL NACIONAL, QUE QUEDÓ A PRUEBA

Equipo “El Siglo”. Valparaíso. Santiago. 09/01/2023

Ángel Valencia logró el cargo impulsado por senadores y partidos de derecha y por un voto casi obligado de legisladores oficialistas. “Defensor privado de agresores, abusadores sexuales, violadores y secuestradores de mujeres y niñas”, defensor de un ex jefe de Carabineros en el caso del asesinato de un universitario, funcionario de la bancada parlamentaria de Renovación Nacional, amigo de empresarios y personeros conservadores, hace pocos días cenó y conversó privadamente con el ex ministro del Interior, Andrés Chadwick, conocido dirigente duro de la UDI. El día de la votación aparecieron versiones de vínculos con los ex alcaldes Pedro Sabat y Luis Felipe Guevara, en casos de corrupción.  Valencia hizo una autopresentación propia de una candidatura electoral partidista, y fue parte de un proceso enredado, gris, elitista, politiquero, donde según algunos dirigentes la institucionalidad quedó dañada. “Tiene (Valencia) que dar una prueba de la blancura”, dijo el senador Francisco Huenchimilla.

En medio de un proceso enrarecido, gris, elitista, politiquero y haciendo una autopresentación de su candidatura como un acto electoral partidista, el abogado conservador, Ángel Valencia, fue designado por el Senado como nuevo Fiscal Nacional.

A pesar de la importancia institucional del cargo, el país contempló un trámite lleno de zonas oscuras, cruzado principalmente por pugnas políticas y partidistas, con el afán de la derecha de imponer a Valencia, vetando dos nombres propuestos antes por el Presidente Gabriel Boric (José Morales y Marta Herrera), camino que incluyó una cena privada del ahora Fiscal Nacional con el ex ministro del Interior de Sebastián Piñera, y hombre duro de la UDI (Unión Demócrata Independiente), Andrés Chadwick, en la casa de éste, donde habría conversado sobre la posibilidad de la designación entre otros temas.

En ese marco, el ex ministro de Desarrollo Social, Marcos barraza, dijo que con procesos como el vivido para la designación del Fiscal, “se deteriora aún más la credibilidad institucional” del Senado. El senador Juan Ignacio Latorre indicó a la prensa que, frente a la situación presentada, “creemos que el Ministerio Público debe modernizarse, debe elevar estándares, debe levantar ese manto de duda que quedó del ciclo anterior donde hubo de alguna manera acusaciones de pacto de impunidad con el mundo político”.

El abogado Ángel Valencia superó el quórum de 2/3 del Senado, y celebró con risas su designación. Olvidando que fue cuestionado por su defensa en casos de abuso y acoso sexual, ejercer como asesor jurídico de la bancada de senadores de Renovación Nacional, trabajar como académico junto al ex ministro del Interior Andrés Chadwick en la Universidad San Sebastián, haber defendido al ex director general de Carabineros, Bruno Villalobos, en el caso del asesinato en 1985 del estudiante de la Universidad de Chile Patricio Manzano y mantener vínculos políticos y de amistad con personeros empresariales y de la derecha, lo que incluiría haber trabajado en una oficina de abogados junto al antiguo dirigente de RN y ex ministro de Defensa de Piñera, Alberto Espina.

Por eso el senador Latorre advirtió que “independiente de los casos que le lleguen de corrupción del sector político, no mire los vínculos políticos que hay detrás, sino que pueda aplicar la ley con todo el rigor”. Una tácita puesta a prueba al nuevo Fiscal Nacional. A lo que se sumó el señalamiento del senador Francisco Huenchumilla: “Tiene que dar una prueba de la blancura, porque es un hombre que tiene contactos por todas partes. Si este año el señor Valencia no logra desprenderse de todos los compadres, amigos, se lo vamos a demandar nosotros”. En tanto, el senador Daniel Núñez, declaró que “creemos que es fundamental que dé garantías al país de que va a actuar con imparcialidad y no va a dar privilegios a ningún sector político y él tiene un vínculo laboral pasado con la bancada de senadores de RN y una relación académica actual con el decano de la universidad en la cual él trabaja que es el ex ministro del Interior Andrés Chadwick. Nos parece que es fundamental la imparcialidad”.

Quizá por eso, la ministra del Interior, Carolina Tohá, dijo enfática que “no hay nada que celebrar; hay mucho que trabajar”. Hay que recordar que, para La Moneda, el abogado conservador jamás fue el candidato idóneo para el cargo, pero ante el veto de la derecha de las dos anteriores propuestas, no quedó más camino que poner a Ángel Valencia sobre la mesa. “La tercera es la vencida”, se dijo. Varias y varios senadores del oficialismo votaron casi obligados para evitarle otro dolor de cabeza al Gobierno.

Precisamente este día de la votación en el Senado, salió la información del vínculo del abogado con los ex alcaldes Luis Felipe Guevara y Pedro Sabat, a quienes habría representado judicialmente por procesos por corrupción. La senadora Loreto Carvajal, expresó que “de acuerdo a los registros judiciales, aquí hay un acta judicial, aquí se da cuenta que la presencia del señor Valencia es tal y en donde efectivamente aparece como imputado don Luis Felipe Guevara Stehpens. Uno preguntaría, si somos capaces hoy día de entender que esos actos que no sólo violentan a la ciudadanía en sus garantías, sino que violentan al Senado cuando se le miente de esta forma, ¿qué podemos esperar de un Fiscal Nacional?”.

También se reportó la cercanía de amistad estrecha del nuevo Fiscal Nacional, con el presidente del Senado, Álvaro Elizalde, que los pone en niveles de poder. El senador Elizalde se abstuvo en la votación para bajar interpretaciones de su relación con Valencia.

Los senadores del Partido Comunista, Claudia Pascual y Daniel Núñez, se abstuvieron en la votación. Núñez manifestó que “para nosotros las violaciones a los derechos humanos es un aspecto ético clave en la investidura que debe tener  una figura como el Fiscal Nacional y que él haya defendido a el ex general director general de Carabineros Bruno Villalobos de una denuncia tan emblemática como fue la muerte de Patricio Manzano que era un joven universitario de la Universidad de Chile que estaba participando en los trabajos voluntarios el año 1985, nos parece que es una situación que hace mella en esa autoridad moral que nosotros esperamos”.

Desde el mundo feminista corrieron los rechazos a la designación. Laura Albornoz, ex ministra del Sernam (Servicio Nacional de la Mujer), escribió en Twitter: “Much@s se dicen “feministas”, pero solo son #FeministasDeCarton otros dicen que apoyan la causa de las Mujeres, #NoLesCrea tienen ese discurso solo hasta que sus compadres, amigos o socios se postulan a #FiscalNacional #ChilePaisEngañado en ese momento se les olvida!”.

En un comunicado, la Asociación de Abogadas Feministas de Chile (ABOFEM), criticó la forma en que Valencia ejerció “la defensa, especialmente respecto de personas que han perpetrado delitos de odio contra mujeres, utilizando prejuicios y estereotipos de género en ellas”. En tanto, desde la Red Chilena Contra la Violencia, cuestionaron “su carrera como defensor privado de agresores, abusadores sexuales, violadores y secuestradores de mujeres y niñas, desacreditando a las denunciantes en favor de su argumentación”. Se enfatizó que “el énfasis debiese estar en el carácter técnico y la proyección de un liderazgo que conduzca el Ministerio Público en la persecución de los delitos” …en un “estricto apego a los derechos humanos, incluyendo, por cierto, el derecho de las mujeres a una vida libre sin violencia”.

Partió con tono electoralista

En un tono electoralista y con fines mediáticos, Ángel Valencia dijo en su autopresentación en el Senado que la gente “pueda contar con el Ministerio Público y va a trabajar tal como lo ha venido haciendo siete días a la semana, 24 horas al día para velar por la seguridad de todas y todos”.

Apuntando a uno de los cuestionamientos principales que hay con la institucionalidad, el abogado conservador sostuvo que “uno de nuestros principales desafíos va a ser recuperar la confianza en el Ministerio Público de parte de toda la ciudadanía”. Otra prueba, esta autoimpuesta. Agregó que “vamos a combatir la delincuencia, los delitos de cuello blanco, el delito de corrupción pase lo que pase, pese a quien pese y pise a quien pise”.

En horas de la noche se reunía a celebrar con familiares, amigos y colaboradores.