RÉQUIEM POR GAZA

por Rafael Narbona (en Twitter) – 10-10-2023 – Gentileza de UTE-73

FOTO GENTILEZA DE EFE

Yoav Gallant, el ministro de Defensa de Israel, ha ordenado un asedio total sobre la Franja de Gaza: "No habrá electricidad, ni alimentos, ni gas, todo está cerrado. Estamos luchando contra animales humanos y actuamos en consecuencia". Es la misma retórica que empleaban los nazis con los judíos, a los que llamaban "subhumanos". Gaza sufrirá tanto como el gueto de Varsovia. Técnicamente, la orden israelí es un crimen de guerra. Al mismo tiempo, la Comisión Europea suspende "de forma inmediata" la ayuda humanitaria a Palestina. La Franja de Gaza ya era casi inhabitable, pero a partir de ahora será un lugar incompatible con las condiciones más elementales de vida.

Los crímenes de Hamás, verdaderamente abominables, no justifican una política que viola todas las leyes internacionales y que aboca a los palestinos a la muerte por hambre y enfermedad. Los bombardeos masivos de la aviación israelí sobre Gaza ya han causado la muerte de casi un centenar de niños palestinos. Es un crimen tan execrable como el asesinato de civiles israelíes perpetrado por Hamás. Los secuestros cometidos por la organización islámica radical tampoco se diferencian mucho de las detenciones administrativas sin cargos ni juicio que desde hace años lleva a cabo Israel, confinando en muchos casos a menores en cárceles donde se los maltrata sistemáticamente.

La ofensiva de Hamás ha sido providencial para Benjamín Netanyahu, cuya reforma judicial había sido cuestionada hasta por EEUU, pues reserva al gobierno el derecho de nombrar jueces y fiscales y limita severamente las competencias del Tribunal Supremo. Todas las críticas han sido aparcadas y Netanyahu sale fortalecido por la crisis. Ahora podrá realizar su sueño de convertir Gaza en un gigantesco solar. Israel cada vez se parece más a la Sudáfrica del apartheid. Aunque aún hay voces críticas en su interior, las nuevas generaciones no esconden su odio hacia los palestinos y sueñan con el Gran Israel, una nación exclusivamente judía y no diversa y plural.

Hamás no es un interlocutor válido para la paz. Su ambición es destruir Israel y utiliza métodos terroristas que atentan gravemente contra los derechos humanos. Desgraciadamente, el Israel que califica de "animales no humanos" a los palestinos tampoco respeta las leyes internacionales. Así como los judíos no son "subhumanos", los palestinos no son animales. Ese lenguaje solo es la retórica inhumana que justifica el genocidio. Solo hay una familia humana. Todos los seres humanos poseen los mismos derechos y nadie debe atentar contra su dignidad. Escandaliza escuchar a Josep Borrell, alto representante de la UE, declarando que no hay ninguna justificación para atacar a civiles inocentes, pero sin hacer ninguna mención a los niños palestinos que están muriendo bajo las bombas.

Netanyahu ha declarado que la operación israelí contra Hamás “cambiará Oriente Próximo”. No lo dudo. Estamos viviendo algo parecido a lo que sucedió después del 11-S. En esa ocasión, un atentado terrorista cambió el rumbo de la historia, favoreciendo los intereses de Occidente. De momento, se está interpretando el Réquiem de Gaza. No sabemos lo que vendrá después, pero seguramente incluirá sangre, sudor y lágrimas de inocentes atrapados en una región maltratada por la historia.